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El 28 de abril decenas de miles de colombianos marcharon en una reiteración renovada del Paro Nacional que había arrancado con fuerza en noviembre del 2019. Con la llegada de la pandemia de COVID-19, el Paro se detuvo, pero las razones de manifestarse aumentaron.

Después de un confinamiento obligatorio de cinco meses en 2020, los casos de COVID en el país aumentaron y con ellos las muertes. En todo el año se agudizó la pobreza. Hasta la fecha Colombia cuenta con 76,000 muertes por COVID y 42.5% de la población en condiciones de pobreza monetaria. El mayor aumento de pobreza fue sufrido en las ciudades y en los sectores más vulnerables, donde encontramos los cambios más drásticos en la economía. Por todo el gasto inesperado de la pandemia, el gobierno nacional propuso una reforma tributaria.

El contenido de la reforma tributaria propuesta generó una reacción fuerte en la población, viéndolo como una manera de exigir recursos de las clases baja y media, profundizando la desigualdad socioeconómica en el país. Y todo eso se añadió a las preocupaciones que existían antes de la pandemia, incluyendo los asesinatos de líderes sociales; la falta de implementación de los Acuerdos de Paz; los pasos del gobierno para reiniciar aspersión de cultivos con glifosato; el costo de la educación superior y la falta de oportunidades para jóvenes, entre otras.

Las movilizaciones del Paro Nacional que empezaron el 28 de abril fueron masivas y han seguido por días. La gran mayoría ha sido pacífica, pero hubo vandalismo en algunas de las grandes ciudades. La reacción del gobierno a las marchas fue velozmente militarizar las calles. Organizaciones de derechos humanos empezaron a reportar violencia desproporcionada y asesinatos por parte de la fuerza pública, documentando decenas de muertes de manifestantes y cientos de personas heridas y desaparecidas, la gran mayoría jóvenes.

En este escenario, las iglesias anabautistas de Colombia han empezado a pronunciarse desde su perspectiva de fe y tradiciones de paz. Aquí les compartimos selecciones de los comunicados públicos de diferentes entidades de las iglesias y reflexiones personales de jóvenes colombianos anabautistas. Que sus palabras y testimonios sean una luz para Colombia en estos días.

 

Foto: Nemy Tatiana Silva García

“Rechazamos la militarización de nuestras ciudades para reprimir las manifestaciones que evidencian el inconformismo del pueblo frente al gobierno y otras instancias estatales en el contexto de la pandemia. Denunciamos y condenamos de manera tajante el exceso de la fuerza policial, así como de las formas violentas que se han infiltrado en las protestas… Instamos al gobierno nacional para que deponga sus acciones represivas y establezca espacios de diálogo que lleven a consensos constructivos con diferentes movimientos sociales y políticos acerca de los temas que aquejan al país con el fin de encontrar soluciones justas y proporcionales a los intereses y necesidades de los ciudadanos. Como Iglesia nos comprometemos en apoyar esfuerzos que vayan en esa dirección y ofrecemos nuestros dones y capacidades basadas en nuestro legado pacifista de más de 500 años.”

Comunicado a la opinión pública: Por el derecho a la paz y la vida digna,” Iglesia Cristiana Menonita de Colombia

 

“El dolor que sentimos nos desgarra el corazón en mil pedazos, las palabras no son suficientes para expresar lo que está sucediendo en Colombia. Nos duele que aun siendo pacificas nuestras acciones las respuestas del estado sean violentas, pero a pesar de esto, nuestro corazón sigue latiendo en la tierra, estamos caminamos de la mano de la justicia y reconciliación para ser sal y luz para Colombia; esforzándonos en hacer mayordomía de los recursos que Dios nos dispuso con dolor, con amor y con esperanza.

Andrea Ricardo Castro Serrano, Iglesia Cristiana Menonita de Encuentro Renovación Pan de Vida, Barranquilla

 

Mapa de Cali. Foto: Colin Vandenberg

“Pedimos el cese de la violencia en todos nuestros territorios, exigimos justicia, verdad y la garantía de los derechos de los colombianos. Desde nuestra convicción de fe, levantamos nuestro clamor a la paz, reconciliación y al diálogo. ‘No Más Violencia.’”

Fundación de Educación para la Paz y Resolución de Conflictos (Edupaz), Hermanos Menonitas de Colombia – Valle del Cauca y Cauca, Cali

 

Foto: Nemy Tatiana Silva García

“El paro nacional no es el capricho de una generación, son las necesidades de años de un pueblo, no válida ninguna muerte pero está haciendo memoria, una memoria de justicia y esperanza.”

Nemy Tatiana Silva García, Iglesia Bautista, Cali

 

“Justapaz como organización del sector religioso por la paz y la acción noviolenta sigue insistiendo en las opciones del diálogo social y la concertación entre el Gobierno y la sociedad civil sobre las políticas sociales, económicas, paz y Derechos humanos, y en particular acompañamos las agendas sociales y de paz que se vienen gestando desde el movimiento sindical, educativo y de derechos humanos. Nos sumamos en oración y solidaridad con personas y familias que han sido afectadas por los hechos violentos. La violencia no es la solución y sólo deja dolor, rencores y muerte.”

“Comunicado a la Opinión Pública, sobre la violencia y represión a la movilización ciudadana en las jornadas de Paro Nacional de abril y mayo de 2021,” Asociación Cristiana Menonita para Justicia, Paz, y Acción Noviolenta (Justapaz)

 

“Anímo a que como comunidades de fe levantemos ese clamor de S.O.S a Dios y que seamos ese ejemplo de paz y reconciliación, sin dejar de lado la empatía y el apoyo a lo que es justo y liberador.”

Jhon Chocue, Iglesia Peniel, Hermanos Menonitas de Colombia – Valle del Cauca y Cauca, Cali

 

“Como entidades de Iglesia de tradición Anabautista y vinculadas a la construcción de paz, estamos comprometidos con la formación bíblica para la paz y la incidencia en lo público teniendo como criterios teológicos y éticos la Noviolencia y la transformación de conflictos como factores fundamentales para caminar hacia la reconciliación con justicia social. La paz cristiana es Shalom de Dios, es decir, signo de bienestar integral, relaciones de justicia y equidad, tanto para el ser humano como para la creación en general.

Guiados por este sentir y criterios del Evangelio de la Paz y la justicia social invitamos al Gobierno y al conjunto de la sociedad civil a profundizar los caminos del diálogo y la concertación sobre las políticas que nos guíen hacia un desarrollo equitativo, hacia una paz justa y el respeto integral a los derechos humanos. Nos sumamos en oración, solidaridad y apoyo al movimiento social que impulsa el Paro Nacional. Nuestro saludo a los movimientos juveniles, mujeres por la paz, sindicalistas, Iglesias por la paz, educadores/as, plataformas de paz y DDHH y toda la diversidad de expresiones populares que trabajan por la vida, la paz y la justicia.”

“Pronunciamiento: Apoyo al Paro Nacional y el derecho a la protesta pacífica social,” Seminario Bíblico Menonita de Colombia y la Asociación Cristiana Menonita para Justicia, Paz, y Acción Noviolenta (Justapaz)

 

“Siento indignidad frente a la vulneración al derecho a la protesta, esperanza frente a una juventud que no se calla y resiste.”

Alejandra Arboleda, Iglesia Filadelfia, Hermanos Menonitas de Colombia – Valle del Cauca y Cauca, Cali

 

Foto: Anna Vogt

“Animamos y recomendamos a los gobernantes y a las entidades correspondientes que a través del diálogo se llegue al consenso, que permita realizar los correctivos necesarios y realizar seguimiento a los aspectos que en dichas protestas se denuncian. Nos duele de corazón los sucesos trágicos y el sufrimiento que hemos venido viviendo.”

Iglesias Cristianas Hermanos Menonitas de Colombia

 

“A la fuerza pública y a las autoridades civiles de la ciudad de Ibagué, solicitamos su liderazgo en la construcción de espacios de diálogo y concertación con la ciudadanía inconforme que protesta. La vía militar no puede ser una solución a los problemas que aquejan nuestra ciudad y nuestro país, menos aún en un contexto de empobrecimiento como consecuencia de la pandemia que tiene a miles de familias y de jóvenes en precarias condiciones de vida.

A las Iglesias Cristianas exhortarlas a la unidad, a ser luz y sal en medio de esta situación que vive nuestra ciudad, a servir como pacificadores en cada lugar en que actúen como seguidores de Jesús, a disponer sus iglesias y servicios espirituales para la paz, para la mediación y para el diálogo.”

“Comunicado abierto frente a los hechos recientes acaecidos en la ciudad de Ibagué,” Iglesia Cristiana Menonita de Ibagué

 

«Los jóvenes menonitas de Colombia estamos preocupados por las constantes violaciones a los derechos humanos por parte de las autoridades colombianas.»

Óscar Suarez, Iglesia Cristiana Menonita de Ibagué, Ibagué

 

 

“Como jóvenes Menonitas Anabautistas que conocemos y vivimos las enseñanzas de Jesús en su gran caminar hacia la construcción de un Reino de Paz, Justicia y Amor, hacemos un llamado al gobierno nacional para que sea respetada la vida, derechos, dignidad y la integridad de todas las personas, y sobre todo respete la vida de los y las jóvenes que se manifiestan ante las injusticias de nuestro país.

“Pronunciamiento sobre las violencias, represión, abuso de autoridad y vulneración a los derechos humanos en el marco de la movilización social de los últimos días en Colombia,” Pastoral Juvenil Menonita de Colombia

 

“Tengo esperanza en un futuro diferente con gobierno justo y donde la dignidad no nos cueste la vida.”

Damaris Guaza, Iglesia Cristiana Filipos, Hermanos Menonitas de Colombia – Valle del Cauca y Cauca, Cali

 

“Lamentamos de corazón los sucesos trágicos y el dolor producido; oramos por las familias que han perdido sus seres queridos, y para que los heridos vuelvan pronto a sus hogares y actividades cotidianas. Desde nuestras congregaciones animamos a la convivencia respetuosa y solidaria, fundamentada en un profundo respeto por el otro, dado que todos somos creación de Dios, hechos a su imagen y semejanza.”

Hermanos Menonitas de Colombia – Región Central, Bogotá y Medellín